El hoyo de Mel Waters, la historia en Coast to Coast AM
El 21 de febrero del año 1997, un hombre que se identificaba como Mel Waters fue invitado a un programa de radio nocturno, conducido por Art Bell. Waters afirmó que era dueño de una propiedad rural en Manastash Ridge, a 9 millas al oeste de Ellensburg en el condado de Kittitas, Washington, donde descubrió un agujero con propiedades que desafiaban las leyes naturales. Los anteriores propietarios utilizaban el hoyo como un vertedero de basura, y también Mel, quien pronto se dio cuenta que el agujero no se llenaba de basura, y cualquier cosa que tiraba en él nunca devolvía ningún sonido de caída en el fondo.
Mel dijo en ese entonces que el hoyo medía nueve pies de ancho en la parte superior. El interior parecía estar forrado con piedras puestas a mano, hasta una profundidad de quince pies. Debajo de esa profundidad, las paredes consistían en roca natural y tierra, descendiendo a la oscuridad. Los nativos americanos de la zona, se mantienen bien alejados de allí. Para pueblos más antiguos se conoce como "el agujero del diablo". Mel aseguró que sus propios perros se negaban a acercarse al hoyo. Tampoco vio otros animales en el lugar, y los pájaros que volaban por encima cambiaban de dirección a mitad del vuelo, en lugar de pasar por encima del hoyo.
Waters intentó medir la profundidad del agujero con un sedal de 20 libras de peso que compró en grandes carretes de 5.000 yardas. Después de sujetar en un extremo de sedal un peso de plomo de una libra, bajó dieciocho carretes de sedal sin llegar al fondo, lo que equivale a 80.000 pies, unas 15.1515 millas o 24.384 kilómetros. En comparación, la caverna más profunda conocida del mundo tiene menos de dos millas de profundidad, y el pozo de la mina más profundo es de menos de tres millas. Mel dijo que cuando gritó en el agujero, no pudo oír ningún eco, sólo silencio.
Mel relató la historia de un deportista local, cuyo perro había muerto en una cacería, después de enfrentarse con un puma. El deportista dejó ir a su difunto canino al agujero. Tres días después, vio a su perro en un campo. El mismo collar estaba alrededor de su cuello, y en el collar estaba la misma etiqueta de plata con el nombre de su perro. El nombre del perro era "Checkers". Pero no hacía caso cuando lo llamaba, y en cambio desaparecía en la maleza.
Si se tenía una radio portátil cerca de la entrada del pozo, en esta sonaban programas y canciones del pasado, pero no en la manera típica en que lo hacen las estaciones de "oldies". Así mismo, en esa radio se reproducían informes de noticias de décadas atrás.
Mel Waters, en una entrevista posterior, dijo que se había dirigido a la fosa para realizar más experimentos, cuando de pronto se sorprendió de encontrar en su propiedad a personas en trajes de biocontención. Al interrogar a uno de estos hombres, le dijeron que su propiedad estaba en cuarentena, porque era el lugar de un accidente de avión. Waters se vio obligado a abandonar la zona, bajo amenaza de arresto. Al día siguiente, Mel recibió una llamada telefónica de un agente federal del gobierno que le ofreció dos millones de dólares por su propiedad en Manastash Ridge, por la que sólo había pagado veintiocho mil. Aceptó el dinero, que según él le permitiría cumplir el sueño de toda la vida, de mudarse a Australia.
Waters afirmó haber vivido en Australia durante dos años, tiempo durante el cual fue advertido repetidamente por personas desconocidas de no volver nunca a los Estados Unidos, pero, a pesar de todo, decidió volver, aunque sólo fuera para ver qué hacía el gobierno en su antigua propiedad.
Según Mel, él iba en un autobús camino al estado de Washington, cuando el conductor se retrasó en una parada de tráfico. Aunque Mel Waters no le dijo a nadie sobre sus planes de viaje, la policía abordó el autobús y sacó a Waters de este. Dos semanas después, se despertó en las calles de San Francisco, sin recordar los quince días anteriores y sin explicación de por qué le faltaban varios dientes.
La opinión del geólogo Jack Powel sobre el hoyo de Mel
Bien, Powel cree que Mel Waters usó ese agujero como una especie de inspiración para armar su propia historia.
Powell explicó que un agujero tan profundo como de 80.000 pies (longitud de línea de nylon que Mel dijo haber utilizado) era una imposibilidad geológica. Pues, según él, profundizar tanto en el núcleo de la tierra causaría que el agujero colapsara debido a la tremenda presión y calor.
En el año 1970, geólogos soviéticos hicieron un agujero en la península de Kola, península que sobresale hacia el este de la masa terrestre escandinava. Esta perforación en Kola tenía sólo 9 pulgadas de diámetro, pero a 40.230 pies (7.6193182 millas o 12.262104 kilómetros) y es el agujero más profundo que se ha registrado alguna vez.
¿Qué opinas sobre el hoyo de Mel Waters? ¿Es este caso solo una interesante invención o uno más de los sitios con características sobrenaturales o desconocidas que hay en nuestro planeta?